Muchos analistas NBA en USA consideraban a Nikola Mirotic la estrella del baloncesto europeo durante la pasada temporada. Su llegada a los Chicago Bulls, previo cortejo de los técnicos de Chicago (con varias visitas al jugador y a su agente en Madrid) fue muy celebrada por los aficionados, sabedores del potencial del jugador.
Mirotic ha sabido adaptarse al tránsito de jugador estrella a jugador complementario o "útil" en la plantilla de los Bulls. Ha asumido que tiene por delante a jugadores altos de la talla de Joakim Noah, Pau Gasol o Taj Gibson, por lo que su participación en la rotación del juego interior del equipo va a ser limitada, debiendo aprovechar lo mejor posible los minutos de los que disponga.
En el primer partido, disputado en el Madison Square Garden contra los Knicks, Mirotic dispuso de 15 minutos, anotando 5 puntos y capturando 7 rebotes. Dos días después, en el partido que abría la temporada en el United Center de Chicago frente a los Cavs, sólo disputó 4 minutos en los que no logró conseguir ni puntos ni rebotes. Sin embargo, al día siguiente los Bulls, que contaban con la baja de Taj Gibson, necesitaban de la aportación de Mirotic para suplirle en la visita al Target Center de Minneapolis. Pues bien, Mirotic jugó 28 minutos, anotando 12 puntos y capturando 8 rebotes en la victoria frente a los Timberwolves.
Mirotic ha dejado clara su total predisposición para ayudar al equipo: <<Todo el mundo quiere jugar, pero sé que en determinados partidos va a ser difícil disponer de muchos minutos. Lo más importante para mí es seguir entrenando duro. Cada minuto que juegue voy a tratar de hacerlo lo mejor posible. No sé exactamente cuál va a ser mi papel, pero estoy listo. Si juego 5 ó 20 minutos voy a tratar de dar lo mejor de mí>>.
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